Lituania, cambiando del gas a la biomasa

Cambio de gas a biomasa en lituania

Lituania y sus 3 millones de habitantes sufrían una gran dependencia de la importación de combustibles fósiles desde Rusia. En 2014, cuando Lituania se convirtió en Estado miembro de la UE, pagó el precio más alto por el gas importado, un precio considerado "político", ya que no era comparable a la situación del mercado. Mientras tanto, los recursos de biomasa autóctona eran (y aún lo son) abundantes. De 2000 a 2016, el uso de biomasa en el sector de calefacción urbana aumentó del 2 % al 65 %, superando así la biomasa utilizada en la calefacción urbana al gas importado. La razón principal de este cambio son los enormes recursos de energía renovable en Lituania, donde los bosques cubren 33,2 % del país ( 2,2 M ha). Además, el precio del uso de biomasa para calefacción es hasta 3 veces menor que el precio del gas natural. La cantidad de biomasa per cápita en Lituania es una de las más altas de la Unión Europea.

Como resultado, la transición del gas importado al combustible de biomasa local se ha traducido en una reducción de costes para los consumidores, así como en una reducción de las emisiones de CO2 . Además más de 7.500 personas trabajan para empresas relacionadas con la tecnología, la producción y el suministro de biomasa. El salario promedio en este sector es aproximadamente 1,5 veces  mayor que el salario promedio en Lituania. La facturación anual de este sector es de aproximadamente 410 millones de euros.

Gracias al rápido ritmo del desarrollo de la bioenergía, Lituania ya ha alcanzado la directiva de la UE sobre los incentivos para el consumo de recursos de energía renovable. Para Lituania, el objetivo es aumentar esta participación al 23 % para 2020.

Más información:
http://www.europeanbioenergyday.eu/curing-a-gas-addiction-thanks-to-local-biomass-2/