Optimizando procesos

La industria, las comunidades de vecinos y los District Heating en España se decantan por la biomasa en busca de ahorro económico y el control de costes. Los últimos datos indican que hay más de 14.000 equipos de entre 50 y 1.000 kW y más de 1.400 que superan 1 MW térmico de potencia.

Anualmente se instalan en España más de mil equipos y calderas para uso industrial y comercial capaces de generar agua caliente, aceite térmico y vapor, así como generadores de aire caliente y frío, secaderos, hornos, climatizadores o generadores de frío industrial que pueden emplear biomasa como combustible.

Muchas empresas gestionan sus propios subproductos y los valorizan energéticamente en industrias cerámicas, cementeras, papeleras, secaderos de madera, de tabaco, de café, de frutos secos, todo tipo de granjas y otros productos agrícolas, invernaderos y en el sector conservero, entre otros.


 
Obtenida la licencia municipal del Ayuntamiento de Aranda de Duero y la concesión administrativa para operar en la zona durante los próximos treinta años, la empresa REBI ha iniciado el derribo de la nave arandina donde construirá la central térmica con la que dará forma a la red de distribución de energía de biomasa, tanto para calefacción como para el agua caliente.
En materia medioambiental, durante 2017 la fábrica de Holcim en Carboneras evitó la emisión a la atmósfera de 5.600 toneladas de CO2, gracias al uso de biomasa. El director de la fábrica, Sergio Martínez apunta que “en 2017 el porcentaje de combustibles alternativos medido por la tasa de sustitución de residuos se situó en el 26,8% lo que refleja el compromiso de la compañía por la sostenibilidad ambiental e implicación en la economía circular”. Más información:
El fabricante de automóviles sueco inauguró el pasado 1 de enero la primera fábrica de la empresa sin impacto en el clima, gracias a su sistema de calefacción renovable, que convierte residuos orgánicos, biomasa y biocombustibles reciclados en energía. La fábrica de motores de Volvo de Skövde (Suecia), se convierte en la primera fábrica de la empresa sin impacto en el clima. La marca sueca se acerca así a su objetivo de cero emisiones en todas sus fábricas para 2025.
La Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural ha finalizado la redacción de la ‘Estrategia Regional de Biomasa’, que entre otros aspectos, fomentará el aprovechamiento de residuos forestales para el ahorro energético y la reducción de emisiones de CO2 a la atmósfera.
El último Consejo de Ministros aprobó un real decreto que limita las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx), dióxido de azufre (SO2) y partículas en suspensión (PM) procedentes de instalaciones de combustión medianas (entre uno y cincuenta megavatios) de todo tipo, biomasa y biogás incluidas. Se traspone así la directiva comunitaria correspondiente con unos plazos que deberán cumplir las instalaciones nuevas a partir de diciembre de 2018, sean centrales de generación de electricidad, calderas comunitarias o redes de calor.
Entre 16.000 y 18.000 toneladas de sarmientos de la vid y cepas de la RIOJA ALAVESA podrían ser empleados como biomasa con un extraordinario poder calorífico para uso energético en la Rioja Alavesa según ha demostrado proyecto Vitibiomera.
BIOGASTUR es una empresa de desarrollo de proyectos de energías renovables que está llevando a cabo un proyecto pionero en Europa, una planta de valorización de residuos que será capaz de transformar hasta 1.200 toneladas al día de deyecciones de vacuno y subproductos de la industria láctea en energía verde y fertilizante de alta calidad para los campos. 
Juan Majada, director de CETEMAS, entidad que usa el edificio indica que han pasado de un gasto mensual de unos 2.100 euros en gasoil a 700 con biomasa, para un edificio que ronda los 3.000 metros cuadrados. "El ahorro es de la mitad, pero si sumas que puedes encender la calefacción cuando y como quieres y por estancias, el ahorro es del 70%", apunta. Asturias es uno de los mayores productores de astilla de España, aún queda camino por recorrer en su uso energético como ya lo hacen en los países nórdicos y centro Europa donde es una energía mayoritaria, sobre el 70%.
El municipio de Sant Pere de Torelló fue uno de los primeros puntos en España donde se realizó una instalación de district heating hace ya más de 30 años. Debido al paso de los años, las tuberías de acero existentes se han ido deteriorando y, por ello, el Ayuntamiento decidió sustituir la red antigua por el sistema de tuberías preaísladas poliméricas.
La Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León (Somacyl) ha licitado por 4,1 millones de euros (IVA no incluido) la contratación de la ejecución de las obras de instalación y mantenimiento de una red de calor con biomasa en Ponferrada.
El Concello de Ribadavia concluyó la obra de colocación de calderas de biomasa en los dos centros unitarios CRA de San Cristovo y Francelos, en los que se hizo una inversión total de 26.000 euros. Una actuación con la que además de mejorar la calefacción en ambas instalaciones se genera un importante ahorro para las arcas municipales. Los dos centros educativos tenían calefacción mediante energía eléctrica, con radiadores que funcionaban las 24 horas del día casi para poder alcanzar la temperatura adecuada, por lo que el consumo eléctrico se disparaba.
El ahorro en el consumo de energía convencional para reducir el gasto corriente y la aplicación de criterios de eficiencia energética para caminar hacia la sostenibilidad, son algunos de los principios que han inspirado la idea de compartir entre todos los edificios sanitarios, asistenciales, educativo y deportivos asentado junto a la calle Boni Laskurain una única caldera de calefacción y agua caliente alimentada por biomasa.